29 de agosto de 2010

D.E.P Satoshi Kon

Sí, este blog empieza a parecer una versión refinada y poco actualizada de las esquelas del periódico. Eso sí, aquí aparecen maestros, que al menos a mí me han marcado en uno u otro aspecto, y que vaya a saber por qué, todos están abandonándonos este año.


El 23 de agosto de 2010 falleció Satoshi Kon, un director magistral, con obras a sus espaldas como Paprika, Tokio Godfathers, o Perfect Blue. Todo un maestro de la animación, que además estaba enfrascado en un nuevo proyecto, que seguramente acabará en el olvido, como tantos proyectos de tantos directores. Como aquella obra sobre Napoleón que quería hacer Kubrik.
Se ha ido un grande del cine, y todo un referente para mí. Y sumada su muerte a la de Frazetta, la de Saramago o la de Nujabes (a quien dedicaré una entrada cuando la asimile), no cabe duda que el 2010 está siendo un año que recordaré, porque ha arrasado con buena parte de mis cimientos en diferentes ramas del arte.
Lo cierto es que ya ni soy capaz de hacer una entrada formal, como hice con Saramago, porque ya me cuesta creer que tantos maestros nos dejen. Me cuesta creer que ya no me emocionaré al leer que Satoshi Kon prepara un nuevo proyecto; como me ocurrió con Paprika, que seguí durante un año, ansioso.


Y como me cuesta creerlo, tocaba dibujar. Intentar hacer justicia al mundo onírico inherente en las obras de este cineasta.

(Photoshop CS3 y Wacom Graphire 4)

Descanse en paz.

17 de agosto de 2010

Bienvenida

Según empezaba la noche, la flor se iba abriendo, poco a poco... con cuidado, los filamentos rojos iban cediendo, con tranquilidad, abriendo.
Los pétalos blancos y amarillentos van apoderándose del espacio, van saliendo rumbo a la tenue luz de la luna. Se abre y ceden, se forman y se muestran en todo su esplendor. El aire la azota, danza muy leve, como una suave brisa en medio de un tórrido día... delicado.
Mucho más tarde la flor se cierra... se va; abandona la soledad del balcón, la compañía de sus iguales.


En medio de la noche una nueva flor decide abrirse. Con mucha calma, pero con decisión, porque ya no puede esperar más. Pasa la noche, la mañana, la tarde, y...
   - Los familiares de "I".
Y entre lloriqueos, leves, revolviéndose y mirando muy atenta a todo... apenas unos minutos de su nacimiento y mirando muy atenta, la flor se muestra abierta, mostrándose a la luz de su familia.


¡Bienvenida Noelia... toda una reina de las flores!